Revés para el trigo transgénico HB4 en Buenos Aires

El Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil Nro 2 de Mar del Plata ordenó la suspensión del cultivo de Trigo HB4 en la provincia.

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El pasado viernes 1ro. de julio, el Juzgado a cargo del Dr. Néstor Salas, dictó la medida cautelar en el marco de la acción colectiva de amparo ambiental  "Un Trigo de Libertad", interpuesta en Diciembre de 2020 por más de cuarenta emprendimientos agroecológicos, organizaciones, asambleas socioambientales y representantes de pueblos originarios de la provincia de Buenos Aires.  

Con mucha polémica, el trigo transgénico resistente al glufosinato de amonio fue aprobado en octubre del año pasado, a pesar de los pedidos de amparo presentados. Desde un comienzo, se escucharon denuncias y advertencias sobre las  graves consecuencias potenciales para la salud humana y el ambiente  de esta tecnología. Resistente a las sequías, su producción requiere de la aplicación de un agroquímico denominado glufosinato de amonio, potencialmente cancerígeno.

La resolución fue dictada en la causa judicial caratulada "Arisnabarreta, Gabriel y otros c/Provincia de Buenos Aires s/amparo colectivo ley 12822-ley 11723-Mardel Plata", busca preservar las variedades tradicionalmente cultivadas de trigo de las posibles contaminaciones cruzadas, y denuncia “no poseer la declaración de impacto ambiental prevista en la ley local 11.723, ni la licencia social, que debe obtenerse en una instancia de participación ciudadana” por su absoluta inconveniencia, en términos socioeconómicos, ambientales y sanitarios.

Silvana Luján, directora de BIOS, e integrante de la Red de Periodistas Científicos celebró la resolución y compartió su espectativa respecto a las medidas que tomarán las provincias vecinas. La conductora del programa radial ECOS, ha buscado abrir el debate como divulgadora científica sobre los impactos del glifosato a la salud y el ambiente, desde la primer liberación del primer evento trasgénico con la Soja resistente al glifosato. Advierte los alcances de la contaminación cruzada y señala que por ser el glufosinato de amonio más tóxico que el glifosato: “sería salir de guatemala y meterse en guatepeor” dice, y espera que el camino judicial sea permeable a un debate “tan sensible como el pan de cada día”. 

También desde la organización Naturaleza de Derechos, señalan que “se trata de una sentencia histórica y un punta pie inicial para poner a los organismos genéticamente modificados (OGM) en un debate institucional en todas las provincias, las que han permanecido ajenas desde la liberación del primer evento biotecnológico desde el año 1996 en la Argentina.”

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